Pastillas que protegen de sol

Uno de los consejos más útiles que puedo daros en esta época del año, en la que el sol es el gran protagonista, es que os protejáis bien del sol. Días apasionantes de piscina o playa pueden verse ensombrecidos por reacciones solares, desagradables quemaduras solares y aumento de riesgo de cancer de piel¡No solo hay cremas de protección solar sino también pastillas!

Estas pastillas (bueno, suelen ser cápsulas) son el complemento ideal para protegernos del sol porque a veces nos encontramos algunos problemas con los protectores solares aplicados ya que no hacemos las cosas todo lo bien que deberíamos:

  • Nos aplicamos menos cantidad de la recomendada.
  • Nos la aplicamos tarde (se recomienda 30 minutos antes de la exposición) o no con la suficiente frecuencia (cada 2 horas). Si uno se aplica la crema en la playa, entre que llegas, te instalas, colocas la sombrilla, le pones la crema primero a los niños… ¡ya te has quemado!
  • No se reaplicadespués de baños, si se suda mucho, o se roza la piel.
  • Mucha gente se deja áreas del cuerpo sin aplicar, no se lo aplica en la totalidad de la piel y mucosas o se le olvidan zonas como las orejas o los labios, donde también salen tumores.
  • Pérdida de eficacia debida a la sudoración, a la natación y al contacto con arena, toallas…
No solo hay cremas de protección solar sino también pastillas, ¿lo sabías? Click Para Twittear

Cualquier persona las puede tomar por el simple hecho de favorecer el bronceado, pero es especialmente importante que tomen las pastillas que protegen del sol:

  • Personas de piel muy clara y por tanto más propensos a quemarse y con mayor riesgo de cáncer de piel.
  • Personas que han tenido cáncer de piel o han tenido familiares con ello.
  • Pacientes con enfermedades fotosensibles, o sea, que brotan con el sol, como el lupus, o alergias al sol.
  • Todo el que trabaje, haga deporte o pase muchas horas al aire libre.

Se toma 1 cápsula al día en el desayuno. Lo ideal es que la piel esté preparada para la llegada del sol, por lo que hay que empezar a tomarlas 15 días antes de la exposición solar. Yo suelo recomendarlas de mayo a septiembre, aunque en personas con problemas de alergia al sol o enfermedades fotosensibles mejor comenzar cuando llegue la primavera, que ya empieza a “animarse” el sol.

Hay gente que no quiere tomar pastillas pero hay que recordar que esto no es medicación, solamente es un suplemento alimenticio, es solo como si comiéramos mejor. Se componen normalmente de antioxidantes, carotenos y algunos otros ingredientes que ayudan desde dentro a nuestras células a defenderse del daño solar.

Si os sirve mi experiencia yo soy muy blanquita, no me bronceo mucho y si me descuido me quemo con facilidad. Desde que tomo protección solar oral cada mañana durante los meses de verano ya no me quemo. Además noto que me pongo algo más morenita y me dura más el color.

Así que recordad, la fotoprotección ideal sería combinar la correcta aplicación de fotoprotectores con la fotoprotección oral. Las pastillas no sustituyen en ningún caso a la correcta aplicación del protector solar sobre la piel, pero son el complemento perfecto de la misma.