Muchas veces cuando nos proponemos bajar de peso lo hacemos por motivos estéticos o celebración de acontecimientos puntuales. Tener unos “kilitos“ de más no es un gran problema para la salud, pero abandonarnos poco a poco hasta llegar a tener un sobrepeso u obesidad sí puede empezar a dar motivos para preocuparnos.

Según las últimas cifras de la OMS, desde 1980, la obesidad se ha más que doblado en todo el mundo. Se dice que 1 de cada 10 personas en el mundo tiene obesidad y además, cada año mueren como mínimo 2,8 millones de personas a causa de este problema. Datos más que preocupantes. 

Consideramos que una persona tiene sobrepeso cuando su IMC es igual o superior a 25 y obesidad si es igual o superior a 30.

La obesidad está aumentando en el mundo a pasos agigantados. Muchas veces pensamos que si estamos ganando peso es por alguna enfermedad rara o cambio en nuestro metabolismo pero la verdad, es que la mayoría de las veces engordar es el resultado de un desequilibrio entre la cantidad de calorías que ingerimos y las que gastamos, sumado a estilo de vida cada vez más sedentario, la ausencia de actividad física y el abuso de alimentos ricos en calorías. Es decir, comemos mucho, mal y no nos movemos. A lo mejor con 20 años esto nos lo podíamos permitir, pero a medida que cumplimos años cuesta más mantener un peso saludable.

La mayoría de las veces, el aumento de peso es sólo debido al sedentarismo y a una mala y excesiva alimentación.

Y este exceso de peso no es sólo un problema estético. Está demostrado que el sobrepeso y la obesidad aumenta el riesgo de desarrollar  hipercolesterolemia, diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares… pero también otras enfermedades importantes y  limitantes  como las migrañas , insomnio, osteoporosis, cáncer, baja autoestima y depresión entre otros.

Migrañas, insominio, depresión… pueden estar causados por un exceso de peso. Click Para Twittear

Por todo esto es recomendable mantener un peso equilibrado. Aunque nos sintamos estupendos con algún que otro michelín, es conveniente acudir a un endocrino, valorar si estamos en un peso saludable o si ha llegado la hora de tomar las medidas necesarias por si no fuera así.

Nos va con ello mucho más que la estética.